Los juguetes simbólicos o de imitación tienen una gran cantidad de beneficios para los niños. Estos juguetes permiten que los niños desarrollen su imaginación, motivándolos a crear historias, personajes y situaciones inventadas. También fomentan habilidades cognitivas al permitirles comprender relaciones, hacer abstracciones, usar su lógica y tomar decisiones. Estos juguetes también pueden ayudar a los niños a desarrollar habilidades motoras, como la coordinación ojo-mano, la percepción visual, el equilibrio, la agilidad y la velocidad. Además, al permitirles imitar relaciones sociales, los juguetes simbólicos o de imitación también ayudan a los niños a desarrollar habilidades sociales, como trabajar en equipo, liderazgo, compartir y tomar decisiones.