¿En qué se diferencia la pizarra vitrificada de la tradicional?
La principal diferencia entre la pizarra vitrificada y la tradicional es que la primera es mucho más duradera y resistente a los productos químicos. Esto significa que la pizarra vitrificada es mucho más fácil de limpiar y mantener. Además, la pizarra vitrificada generalmente es más resistente al desgaste que la tradicional, lo que significa que el usuario puede disfrutar de su uso durante más tiempo. Otra diferencia es que la pizarra vitrificada generalmente es mucho más fácil de instalar y mover, por lo que es ideal para aquellos que desean cambiar la ubicación de la pizarra con mayor frecuencia.