Las sillas para colectividades deben contar con un diseño ergonómico, que permita a los usuarios sentarse cómodamente durante largos periodos de tiempo. Además, deben ser resistentes al uso intensivo y los materiales empleados en su fabricación deben resistir la abrasión y roturas. Las sillas para colectividades también deben incluir algunas características extras como reposabrazos, respaldo ajustable y ruedas para facilitar su movilidad. Estas características son interesantes porque permiten a los usuarios sentarse cómodamente, mejoran la ergonomía y facilitan el movimiento de la silla de un lugar a otro.